Domingos 11.00AM

La única vida cristiana verdadera es la vida guiada por el Espíritu. Todo en la vida del creyente es producto del Espíritu Santo desde el principio hasta el final. Todo comienza con lo que Jesús llamó el nuevo nacimiento. “Jesús respondió: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios” (Juan 3:5). Cuando un individuo escucha la palabra de Dios y la acepta en su corazón, se convierte en miembro de una raza completamente nueva, naciendo del Espíritu Santo. Esta persona es regenerada por el Espíritu y recibe la naturaleza de Dios. Todo a partir de este momento es cuestión de aprender a caminar, o ser guiado, por el Espíritu Santo, el cual está en perfecta armonía con Dios y la palabra escrita de Dios, la Biblia. Casi todas las religiones, incluidas las religiones cristianas, no están guiadas por el Espíritu. Son guiados por personas, no por Dios.